"Darles a los tontos su oro, y a los bribones su poder; deja a las burbujas de fortuna subir y bajar; el que siembra un campo, o entrena una flor o planta un árbol, es más que todo. "- John Greenleaf Whittier (1807 - 1892) escritor estadounidense

Antes de mudarse a Paraguay, nunca me imaginé que alguna vez sería un agricultor. Pero después de la compra de mi casa aquí, me decidí a hacer un buen uso de mis tres hectáreas. Compré siete vacas lecheras, seis holandesas y una jersey, y comencé a vender leche a una fábrica de yogurt la cual está cerca de mi casa. También compré unos cerdos y una docena de gallinas.

Para aquellos no familiarizados con el cultivo de su propia comida, se sorprenderán de lo bien que se siente al hacer algo tan simple como beber jugo hecho del fruto de sus propios árboles. Comida fresca y hecha de su propia granja tiene un sabor más rico, y si los terneros son alimentados solo de pasto,  y las gallinas son caseras y las verduras no tienen OGM, también es mucho más saludable que los alimentos procesados en una fábrica. .

La producción de su propia comida no sólo es buena para su salud y económicamente sensata, sino que también tiene un componente emocional o espiritual. Hay algo primitivo acerca del trabajo de la tierra y la cría de animales de la manera que la humanidad ha hecho por milenios. Cuando yo he ordeñado y alimentado a mis propias vacas, he utilizado su estiércol para fertilizar a mi suelo, he recogido los huevos de mis gallinas, o he cosechado mis verduras, he sentido una sensación de satisfacción, de ser recompensado por mis esfuerzos. Matar y faenar a los pollos y cerdos, aunque sin duda no es una tarea agradable, me dio la sensación de un vínculo común con nuestros ancestros, de ser parte de un sistema de vida que ha existido desde los inicios de la humanidad. Más que nada, la producción de su propio alimento da un sentido de la independencia y la autosuficiencia

En mi opinión, Paraguay tiene más que ofrecer a aquellos que buscan la granja por lo menos en parte. Las propiedades son menos costosas y más bellas cuando más alejado están de la capital, el suelo es fértil, y el clima es muy favorable para la agricultura. No es tan difícil como uno podría pensar, y los que están jubilados, o con un ingreso fijo dará la bienvenida a los ahorros en los gastos de alimentos. .